miércoles, 16 de mayo de 2007

[previos] ALONSO: "el primer motor..."

EL FAMOSO FIN DEL CICLO “EXPANSIVO”, O DE CÓMO EFECTUAR UNA LECTURA POSITIVA PARA LA AQUITECTURA/CONSTRUCCIÓN.



Asistido hemos, durante un largo período de tiempo al llamado ciclo “expansivo” inmobiliario-constructivo. La bonanza económica suele, lastimosamente, comportar el estancamiento innovador, el inevitable estancamiento investigador, el parón en fin, mental para el avance de cualquier tipo.

El “todo se vende” del mercado inmobiliario comporta (ha comportado) una posición harto conservacionista del sector capitaneado por los exitosos departamentos comerciales (comprensible por otro lado aunque no compartido). La repetición del modelo ya vendido, ya construido, ya asimilado, ha sido la bandera.

Dado, pues, que una de las claves en los desarrollos económicos de una sociedad, basada en el concepto capitalista tradicional, es el entendimiento y la asunción del concepto del concepto del ciclo económico, es a través de esa asunción, desde donde deberíamos ahora focalizar el frenazo de todos, para aportar una de las visiones optimistas de tal circunstancia. Aprovechar el esfuerzo para posicionarnos ante el siguiente acelerón, con mejores y renovados recursos constructivo-arquitectónicos.

Recuerdo la aguda crisis del petróleo sufrida en los ’70 y sus resultados en la industria automovilística: fué a partir de entonces que todos sus esfuerzos se volcaron en la investigación y desarrollo a fondo, para llegar a producir infinidad de mejoras como los motores diesel con rendimientos similares a los de gasolina, con aportación de criterios aerodinámicos nuevos y mejorados, en fin, con la optimización de recursos energéticos.
Quizás es así, con esa insistencia, perseverancia y consistencia cuando la Arquitectura deviene, como decía Aristóteles, el primer motor, el primer resorte que mueve toda la cadena, y dictamina, de una forma equilibrada y harmoniosa una forma de construir, y al fin y al cabo una forma de habitar.

La asignatura pendiente en inversión en I+D podría, debería tener aquí y ahora un protagonismo de todos los agentes implicados (arquitectos, constructores, industriales, inmobiliarios y fundamentalmente la clase política) para dar paso a una puesta al día de tantos y tantos “flecos pendientes”: la industrialización, las nuevas tipologías fruto de una sociedad diferente, los conceptos de sostenibilidad… (a buen seguro que tú, colega y amigo, añadirías también un sinfín de conceptos a la lista).

Firmado,
Luís Alonso
Arquitecto



Barcelona, 17 de Mayo de 2007

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